He longed for someone to understand him and accept him as he was. He never felt like he measured up to other men. He always felt inadequate. So he put on a front to make himself look better than he felt so that he would be desirable to women. He played the field, but he really wanted that one woman wanted to spend a lifetime with him. He was tired of being alone.
She was considered by many to be beautiful. Her parents bragged about their beautiful daughter, and her mother encouraged her to play to her strength, so she did. Men were drawn to her likes flies to honey. To them she was a sexual treasure, so she gave away her treasure frequently, hoping to find the man who could look deeper than her physical beauty. With each encounter she felt cheap and ugly inside.
He was smart and successful. He could make money so easily it was insane. Now he had more money than he could spend, but he had no one he could spend his time that he trusted. People loved his money, not him. He would gladly give all his money away for one true and loyal friend.
She was an outstanding athlete. She always was in contention for winning, and usually did. People flocked to her for her autograph. They wanted pictures with her. Young children wanted to be like her when they grew up. But when the sun set, and she was in her own place, she felt empty. Fame wasn’t enough. She often fell asleep sobbing into her pillow.
Many people are connected to an always growing number of people on different social media apps. Many use a pseudo names and identities, as do many of the people they are connected with. Through these apps, they are connected to many, but close to none. They wonder why they feel so alone when they “know” so many.
People desire intimacy; they always have and always will. Yet so many people come up empty in their pursuit. Read Ecclesiastes in the Bible and you will find that one very wise, wealthy and powerful man found that acquiring intimacy was like chasing the wind. Perhaps you can relate.
If your are not successful in helping you experience intimacy, maybe going back to proven ways is worth a try. Maybe guidance from the God who created you to be in relationship will actually help you find those relationships that bring intimacy. If you want intimacy that brings true friendship, faithful companionship, perhaps a lifelong partner, listen to God.
If you are willing to try his way, I offer you a start by giving you 3 biblical texts to look into. Read them. Pray for wisdom on how to live them. Then learn to live them in all your encounters. Live these out and you will experience different levels of real intimacy. Intimacy will no longer be gone with the wind, instead it will become a solid reality in your life. Give God a shot at bringing you what might be missing in your life.
John 18:20-23, 1 Corinthians 13:4-7, Philippians 2:1-8.
¿La Intimidad Se Ha Ido Con El Viento?
Anhelaba que alguien lo entendiera y lo aceptara tal como era. Nunca sintió que estuviera a la altura de otros hombres. Siempre se sintió inadecuado. Así que se puso una fachada para verse mejor de lo que se sentía y así ser deseable para las mujeres. Jugaba en el campo, pero realmente quería que una mujer quisiera pasar toda la vida con él. Estaba cansado de estar solo.
Muchos la consideraban hermosa. Sus padres se jactaban de su hermosa hija y su madre la animó a aprovechar sus fuerzas, y así lo hizo. Los hombres se sentían atraídos por ella como las moscas por la miel. Para ellos ella era un tesoro sexual, por lo que regalaba su tesoro con frecuencia, con la esperanza de encontrar al hombre que pudiera mirar más profundamente que su belleza física. Con cada encuentro se sentía tacaña y fea por dentro.
Era inteligente y exitoso. Podía ganar dinero con tanta facilidad que era una locura. Ahora tenía más dinero del que podía gastar, pero no tenía a nadie en quien confiar. La gente amaba su dinero, no a él. Con mucho gusto daría todo su dinero por un amigo verdadero y leal.
Ella era una atleta destacada. Ella siempre estuvo en la lucha por ganar, y por lo general lo hizo. La gente acudió en masa a ella para pedirle un autógrafo. Querían fotos con ella. Los niños pequeños querían ser como ella cuando fueran mayores. Pero cuando se puso el sol y ella estaba en su propio lugar, se sintió vacía. La fama no fue suficiente. A menudo se quedaba dormida sollozando sobre la almohada.
Muchas personas están conectadas con un número cada vez mayor de personas en diferentes aplicaciones de redes sociales. Muchos utilizan pseudonombres e identidades, al igual que muchas de las personas con las que están conectados. A través de estas aplicaciones, están conectados con muchas, pero casi con ninguna. Se preguntan por qué se sienten tan solos cuando “conocen” a tanta gente.
La gente desea intimidad; siempre lo han hecho y siempre lo harán. Sin embargo, muchas personas se quedan vacías en su búsqueda. Lea Eclesiastés en la Biblia y encontrará que un hombre muy sabio, rico y poderoso descubrió que adquirir intimidad era como perseguir el viento. Quizás puedas identificarte.
Si no logra ayudarlo a experimentar la intimidad, tal vez valga la pena intentar volver a métodos probados. Tal vez la guía del Dios que te creó para tener una relación realmente te ayude a encontrar esas relaciones que te traen intimidad. Si desea una intimidad que le brinde una verdadera amistad, un compañerismo fiel, tal vez una pareja para toda la vida, escuche a Dios.
Si está dispuesto a probar su camino, le ofrezco un comienzo dándole 3 textos bíblicos para que los investigue. Léelos. Ore por sabiduría sobre cómo vivirlos. Luego aprende a vivirlos en todos tus encuentros. Vívalos y experimentarás diferentes niveles de intimidad real. La intimidad ya no se la llevará el viento, sino que se convertirá en una sólida realidad en tu vida. Dale a Dios la oportunidad de traerte lo que podría faltar en tu vida.
Juan 18:20-23, 1 Corintios 13:4-7, Filipenses 2:1-8.
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